MOMENTO BODA.

  Cuando mi amiga Susana me soltó al día siguiente de su boda que había sido "la mejor boda en la que he estado", casi me caigo de culo. Sobre todo porque yo hacía sólo un año que me había casado.

  Supongo que su ceremonia en Los Jerónimos le hacía sentirse más casada que yo que lo hice al atardecer al ritmo de Elvis. Luego se encargó de recordarnos lo caro que era el banquete en el Ritz.

  Creo que todas mis amigas se enajenan mentalmente desde el día que deciden casarse. Desde ese momento, concluyen que su boda es lo más importante del mundo. No hay evento más especial ni atellier suficientemente bueno para su vestido.

  Os tengo que contar todo desde el principio. Cuando recibí la invitación de Susy no me lo podía creer. 

   - Mira  Jim, éstos sí que son prácticos, han puesto el número de cuenta en la invitación.

   - Sí, sí... mucha pijada y mucha letra inglesa para acabar soltando que si no pagas mejor no vengas.

   - Vaya, me hacía ilusión regalarle un cuadro tuyo.

   - Ja, ja...cuando lo reciban escupen encima fijo.

   - No exageres. Pues nada, a ahorrar para un vestido de Jesús del pozo que he visto.

   - Tienes el armario lleno de trajes nuevos de otras bodas.

   - Sí, pero Susy dejó caer en facebook que en su boda se estrena. De todas maneras, pensaba pasarme por el showroom de Ali, a ver si me entra la talla-actriz y me presta algo.

   Menudo estrés de año. Tuve que organizar yo la despedida de soltera. Susy me llamó y me comentó su fecha disponible.

   - Rose cariño, lo dejo en tus manos. Conociendo a mi futuro marido, mejor hacerla el mes antes. Si se lía con la streaper, tengo tiempo para torturarle y convencerle de que las Fiji están out. La luna de miel tiene que ser absolutamente especial: volcanes en Guatemala o las llanuras de Mongolia. Ya están empezando a construir resorts allí. 

   - Veo que lo tienes todo muy bien pensado. ¿Le perdonarías los cuernos a un mes de la boda?.

   - Joder Rose, llevo tres años con fecha en Los Jerónimos. ¡Me caso y me caso!. Cambiando de tema, por una vez no estaría mal olvidarnos de los boys y los penes de diadema. Que sea algo más fino, como un fin de semana en Roma.

   - ¿A Roma?.

   - Claro, beberemos buen vino y conoceremos chicos guapos como en las novelas de Federico Moccia.

   Así que me puse manos a la obra y preparé el viaje a Roma. Despedida en la ciudad eterna y banquete de boda en el Ritz con todo detalle, incluido la pularda tan de moda.

   - Sí Rose. Lo de las fincas ya está muy visto, ahora volvemos a lo clásico. No eres nadie en Madrid sin una reserva en el Ritz o en el Palace.

   - Gracias, te recuerdo que yo me casé en una finca.

   - Eso es distinto. Vosotros sois tan bohemios...

  Desde luego con una boda por medio, se descubre la verdadera cara de un amigo. La verdadera cara y un pésimo gusto literario. Me conformo con guardarme un as en la manga...Jim me contó que en la despedida de Borja, le pilló en el baño con su primo el de Toledo. Estaba en posición poco ortodoxa, "probando otras cosas antes de que me cacen", se disculpaba entre jadeos.